Distancia: 57 km. Desnivel 1080m.
Presencia habitual de 16 Bikers: Fonso, Edu,
Emilio, David, Javi, Jorge, Suso, Orlando, Gorka, Roberto, Javier Gzlez, Urko,
Ion Oskar, Joxeanko y Álvaro. Un par de ausencias importantes de 2 bikers de
abolengo que abandonan el cajón del podio: Inaxio, presidente del PEB e Iván
que se marcharon a un viaje por Marruecos en BTT por el desierto. Menuda
envidia!. Quiero también recordar la ausencia de Iñigo Urtaran, debido a una
mala caída. Esperamos que te recuperes pronto Iñigo! En nada estás de nuevo
re-estrenando tu súper Giant doble de carbono en el grupo. Además, ese día
contamos con un nuevo biker en nuestro enorme pelotón que se llama Álvaro y
que, pese a no tocar la bici en años se destapó como un biker con mucho futuro.
Joxeanko, duda hasta última hora por creerse bajo de forma, ha resultado un tío
recio, que fiel a su ritmo diesel es capaz de rodar muchos kilómetros y hacer
mucho desnivel, como fue el caso de este día.
Bueno, vamos a lo que vamos… Salimos con tres
minutos de retraso esperando a algún rezagado que creía que ese domingo también
se salía a eso de las 8:40. Esta vez hubo suerte y les recogimos en una de
tantas rotondas de Abetxuko e iniciamos la aproximación a la zona de ascenso
por el Vasco-Navarro que nos llevó hasta Landa siendo unos 18 km desde el
parking en 1h 10’ debido a un par de parones técnicos. El día prometía y así
fue, un espléndido día de finales de invierno que nos permitió disfrutar de
unas espectaculares vistas de la orografía que rodea nuestra querida ciudad.
Una vez en Landa seguimos por la antigua carretera
a Vergara, saliéndonos antes de llegar a la virgen de Dorleta, nuestra patrona
(la de los ciclistas). En cuanto el camino se empina, ya están los de siempre.
Como viene siendo habitual salen disparados Alfonso y Suso, esta vez con la
compañía de un tercero en discordia: Ion. Yo les sigo en la distancia porque
las pendientes son muy muy duras y mi peso no pe permite grandes derroches.
Además asfixiado de calor me paro para quitarme la chaqueta y se me engancha el
reloj pulsómetro que va echando humo. Me adelantan Jorge y Roberto. La cabeza
del pelotón por dónde andará. Salgo disparado en su búsqueda y tras algún
kilómetro los encuentro parados esperando en un cruce. Yo sigo por un sendero
que parece que bordea la subida y me siguen, pero no nos da buena espina y nos
damos media vuelta y nos cruzamos con Jorge y Roberto que nos seguían en
nuestro error. Poco más allá, David nos saca de dudas y nos indica el camino
bueno para darle el último empujón a la ascensión. La última rampa es
dura y con piedras. Alfonso elige una mala trazada y se para y nos hace parar a
Suso y a mí que le seguíamos poco detrás. El único que no se baja de la bici es
David Koper que este año anda con bastante fuerza en las piernas. Hacemos cima
entre Urdingain y Makatzgain, que son dos cumbres adyacentes y allí mismo nos
ponemos a papear algo.
Urdingain o Arriurdin es una de las cimas en el
extremo occidental de la sierra de Elgea. Esta es la cima que tiene el
repetidor de la televisión vasca. Es algo más pequeña (992m) que otra cima
cercana –separada por un insignificante collado donde nos paramos- que se halla
al norte y que se conoce con el nombre de Makatzgain ( 1.002m ) y que presenta
excelentes vistas sobre el Alto Deba. Allí nos quedamos al principio esperando
al resto de bikers que no tardaron en llegar mientras nos avituallábamos. Como
soplaba algo de viento nos acercamos al repetidor pero el viento era muy
parecido allí. Las vistas espectaculares desde allí. Si mirabas hacia el sur se
veían rodeando la llanada alavesa los montes de Vitoria, con Gasteiz en el
centro y el embalse de Ullibarri a sus pies. Hacia el oeste se divisaba
perfectamente el muro de la Sierra Salvada donde nace el Nervión y el imponente
Gorbea todavía nevado. Hacia el norte, el valle del Alto Deba bajo el Amboto
vigilante. Y mirando hacia el este, el cordal de la sierra de Elguea Urkilla
salpicado de molinos de viento que se extiende este-oeste hasta la Sierra de
Aiztgorri, donde se sitúan las cumbres más altas de Euskadi, por cierto, con
nieve.
Tras ese relajo y disfrute de nuestros sentidos,
nos ponemos en marcha justo cuando llega Joxeanko. Le damos un poco de aire y
seguimos hacia la zona de los molinos. Daba sensación de ser un camino cómodo
pero nos tocó hacer bici-empuja en concreto en una rampa muy dura que rondaría
el 25% pero con piedras, barro y trialeras todo junto. El único que creo que
subió la cuesta sobre la bici fue Alfonso. Cómo le molan esas cuestas al
jodío! Seguimos un poco más, pero enseguida iniciamos el descenso dirección
sur, que bajo mi punto de vista fue lo peor del día. El descenso lo hicimos
entre tramos con nieve donde no había forma de mantenerse encima de la bici, y
tramos con barro y piedras donde la pendiente no nos daba ningún respiro y nos
dejó las manos y las pastillas echas un asco. Más de una caída sin ningún daño
personal, pero si alguno material: Álvaro tras su caída hizo una raja en la
maneta del cambio, rozó el puño, desencajó el eje de la rueda delantera (se
cayó de nuevo más adelante) y pinchó… En sus declaraciones a la prensa relataba
(je, je…): “no suelo ser cenizo, esto me ocurre hoy pero no vuelve a pasarme en
meses…”. Lo que si que está claro es que tuvo la enorme fortuna de contar con
la inestimable ayuda de Ion, experto de la mecánica de la bici por su trabajo
en Vibike.
Llegamos todos enteros a Ozaeta y desde allí
iniciamos el llaneo típico de cuando vamos a Izki dirección oeste con algún
tobogán suavecito, pero ya a falta de unos pocos kilómetros para llegar a casa,
con más hambre que vergüenza. Pero, quedaba la guinda para rematar un día de
BTT con cierta dureza: la vuelta la hicimos con viento en contra, que nos hizo
ralentizar un poco el ritmo. Alfonso, consciente de la tralla de este año había
venido en bici desde Legutio, así que le tocaba dar algún pedalada más. Si los
demás hicimos unos 55 kms el peso mosca de Legutio ya andaría cerca de los 90
kms. Luego nos preguntamos, como es que anda tanto. No hay secretos en esto de
la bici: constancia y pedaleo.
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